Quien salió a defender ayer la instalación de nuevas casillas frente al nuevo edificio del IPS de Ciudad del Este fue el concejal Herminio Corvalán (Tekojoja), señalando que les había prometido a “las señoras” que vendían sus productos frente al centro asistencial desde hace muchos años.
Lo cierto es que unos pocos concejales que hasta hace poco hacían oposición al clan Zacarías desde la Junta Municipal de Ciudad del Este, hoy están fuertemente involucrado en la repartija de espacios públicos y la ocupación indiscriminada de veredas en varios sectores de la ciudad. Y entre ellos resaltan claramente Celso Miranda Kelembú y Herminio Corvalán.
El primero admitió que instaló a su gente sobre la avenida Pioneros del Este, frente a Arco Iris; y el segundo también admite que él presentó el proyecto para levantar casillas a “las señoras” frente al IPS; en ambos casos, usando espacios que pertenecen legítimamente a toda la ciudadanía.
Durante una extensa entrevista con Radio Concierto, Herminio Corvalán intentó justificar su cambio de opinión, ya que de ser uno de los férreos enemigos de la ocupación de espacios públicos cuando eran allegados del clan Zacarías los beneficiados; pasó ahora a ser respaldo incondicional de los usurpadores.
El concejal admitió incluso que “siempre dijimos que había negociados en la venta de casillas”, pero sostuvo que en el caso del IPS era “una cuestión humanitaria”, ya que las vendedoras trabajaban a la intemperie de eran perseguidas por la gente de la previsional, y la propia municipalidad.
Insistido si cuál era la diferencia entre esos ocupantes de espacios públicos, con aquellos a quienes criticó él desde la Junta hace pocos meses por apoderarse de las veredas del microcentro, respondió que los periodistas solamente querían “generar conflictos, controversia y confrontación”.
Un poco más tarde, el nuevo “perro” del clan Zacarías, Celso Miranda Kelembú, grabó un nuevo vídeo en el cual no solamente justificaba la venta de espacios públicos, sino también anunciaba que seguirían con ese “trabajo” de llevar a su gente para apoderarse de las veredas.
Sin perder la oportunidad de atacar con lenguaje soez a periodistas de Concierto, el farsante concejal Kelembú que hizo campaña con la lucha por la transparencia y contra los Zacarías, y que ahora es un “perrito” más de los corruptos de ese clan familiar, también intentó justificar sus negociados para hacer ocupar los espacios públicos en detrimento de la ciudadanía.
Lo cierto es que la acción de los mismos concejales que se preciaban de opositores, es lo que hoy está despojando a la ciudadanía de Ciudad del Este de sus más valiosos espacios públicos.
Entretanto, estos mismos embusteros que se llenaban la boca denunciando la venta de casillas, siguen aprobando licitaciones sobrefacturadas para que el clan Zacarías se llene los bolsillos, y sin que ellos cumplan con su deber de controlar si esas inversiones se hicieron o no correctamente.