Revestida de mentiras que le preparó una veintena de asesores, y con respuestas que generaron la indignación ciudadana y las burlas en las redes sociales, Sandra María Mc Leod de Zacarías no logró ayer refutar ninguno de los 15 puntos de la acusación de los concejales que pidieron la intervención.
La ladrona intendenta de Ciudad del Este dejó al descubierto que NO es ella quien maneja la Municipalidad, y que no está enterada ni de la mitad de los temas que le plantearon ayer en la Comisión de Diputados. Al final, pidió una nueva oportunidad para su descargo, y se dilata la votación para la intervención.
Por dar algunos detalles, la bandida jefa comunal no supo explicar el destino de los 36.600 millones de guaraníes que reclamaron los concejales, y ni sus asesores mostraron tener conocimiento del destino de tan millonaria tragada.
Varios fueron los asesores de “la malandra” que hablaron, pero nadie pudo dar luz sobre el cuestionamiento de los concejales.
En el tema de la falta de ingreso en caja del dinero del estacionamiento controlado, hicieron largos silencios ya que los documentos son irrefutables.
Los concejales habían denunciado que entre los meses de enero a julio del año pasado, ni un solo guaraní ingreso en caja de la Municipalidad, lo cual indica que “nadie estacionó su vehículo” en las calles del microcentro en ese periodo de tiempo.
Sandra quiso zafar este punto haciendo otros comentarios, como en sus 15 respuestas, indicando que el dinero es derivado a instituciones benéficas como APAMAP, el Obispado, en Instituto Próvolo, los Bomberos y otros. Los desmentidos no tardaron en llegar desde algunas de estas entidades, ya que los desembolsos no son mensuales, tal como aseveró Sandra.
La intendenta tampoco pudo explicar del porqué no comparece ante la Junta Municipal tal como le obliga la Ley Orgánica Municipal. Dijo que “ella misma pidió ir” a hablar con los concejales pero nunca le respondieron, y las veces que fue convocada, “siempre lo hicieron en horarios y días en que ella estaba ocupada”, Sus respuestas generaron la indignación ciudadana y las duras respuestas de los concejales.
Al final, Sandra de Zacarías pidió una nueva oportunidad para “completar” su descargo, donde seguramente hará uso de la palabra su marido, el ahora senador Javier Zacarías, quien es el “intendente de facto”. La comisión especial fijará nueva fecha para escucharla, pero también deberá confrontar sus respuestas con los concejales. Por ahora, se dilata la intervención.