Lo dijo durante una entrevista en la mañana de este jueves en el programa “HDP” de Radio Concierto. Roberto González Vaesken respondió así a las críticas y reclamos de la ciudadanía en general por su silencio durante las últimas manifestaciones que tumbaron al clan Zacarías de la Municipalidad de Ciudad del Este.
Desde el inicio de la crisis, con la usurpación de la intendencia por parte del concejal Celso Miranda “kelembú”, Roberto González Vaesken no hizo una sola manifestación pública, mientras por lo bajo se hablaba de su indisimulado apoyo al farsante concejal de Ciudad del Este que decidió aliarse al clan Zacarías después de mentir por dos años y medio a la gente.
“Los manifestantes que salieron a las calles, fueron 3.000 o 2.000, lo hicieron porque responden a determinados sectores políticos, tienen sus intereses, querían una parte del botín”, dijo al revelar lo que es para él la administración municipal de Ciudad del Este, “un botín”. “Si hacía falta, íbamos a estar con la gente en las calles, pero decidimos quedar mirando de lejos”, afirmó, al serle mencionado que el propio presidente Mario Abdo Benítez anunció que apoyaba la caída del clan Zacarías, desde las calles.
Vaesken criticó a los concejales que votaron por la elección de Perla de Cabral para estar por tres meses en la intendencia, y dijo que la misma responde al riñón del clan Zacarías. Sin embargo, quiso “valorar” la presencia a su lado de Juan Carlos Barreto, el concejal que se vendió al clan Zacarías y dejó que uno del clan de ladrones quede con su banca, a cambio de un cargo en Itaipú.
“Juan Carlos tuvo 12.000 votos en Ciudad del Este”, dijo, refiriéndose a las últimas internas del 17 de diciembre del 2017, y como si esos 12.000 votos volverían a ser lo mismo después que el mismo se haya vendido al clan Zacarías. El Gobernador descalificó así además a la consciencia de la ciudadanía, que ya no tolera a los políticos vendidos, y no volvería a votar por quienes se identifican con la impunidad, como Juan Carlos Barreto.
En la última parte de la entrevista, González Vaesken ratificó que los manifestantes lograron la intervención de la Municipalidad, luego la destitución del clan Zacarías y finalmente la expulsión del usurpador “kelembú” de la intendencia, apenas “buscaban una parte del botín”, y en realidad no quieren la transparencia y el fin de la corrupción. “En esas manifestaciones nosotros no vimos gente buscando el bien común”, espetó finalmente, al descalificar olímpicamente los deseos del pueblo esteño por transparentar el uso del dinero público.