Tanto desde el Ministerio Público como desde el Poder Judicial, en Asunción y Ciudad del Este, fiscales y magistrados se turnan para admitir las chicanas del clan de ladrones que saqueó el Este del país por casi 20 años, y así encaminar las causas abiertas contra los integrantes de la GAVILLA FAMILIAR, hacia el olvido definitivo.
Al menos entre las dos últimas denuncias presentadas en la Fiscalía de Ciudad del Este por parte de la administración municipal actual encabezada por Miguel Prieto, fueron a caer en manos de dos SERVILES al clan de ladrones, que son JULIANA GIMÉNEZ (recientemente nominada camarista) y CINTHIA LEIVA, la misma fiscal del caso “Sarita” y de la detención de “Payo”, por haber grafiteado su despacho.
Y como era de esperar, ni una sola diligencia se ha hecho hasta ahora para tratar de investigar lo denunciado, que habla de hechos punibles contra el ejercicio de funciones públicas, asociación criminal, exacción, entre otros. Esta denuncia fue contra Sandra Mac Leod de Zacarías, su esposo Javier Zacarías Irún y un funcionario municipal de cargo de ellos, Gabriel Fletes Melgarejo.
Los citados, según la denuncia, robaron a contribuyentes, al cobrar indebidamente por un canon inexistente. Se trata de G. 2.141.000.050 (dos mil ciento cuarenta y un millones cincuenta mil) que cobraron de manera indebida a contribuyentes supuestamente por canon inexistente, referente a impuestos inmobiliarios y exoneraciones de multas y recargos.
Pero el clan Zacarías tiene también otras causas que no son diligenciadas, o que están cajoneadas en la Fiscalía o el Poder Judicial. Uno de ellos es el caso de ENRIQUECIMIENTO ILÍCITO, LAVADO DE DINERO, ASOCIACIÓN CRIMINAL, entre otros hechos, donde ni siquiera aún hay imputación, y donde en primera y segunda instancias los magistrados serviles al clan, negaron a la Fiscalía la posibilidad de reabrir la causa.
Sin embargo, la propia fiscalía había acumulado una causa nueva, del 2018, a una del 2007, y así la actual Fiscal General del Estado Sandra Quiñónez favoreció al clan de ladrones, lo cual fue confirmado por el juez Marino Méndez después, y ratificado por la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones.
Hay otro proceso por DECLARACIÓN JURADA FALSA, donde Javier Zacarías ya está desaforado, y hay un pedido del Ministerio Público para la prisión del mismo. Sin embargo, chicanas del abogado de los Zacarías hacen que el caso está paralizado. En otro proceso por LESIÓN DE CONFIANZA, que vincula a la pareja de ladrones con robos en la Municipalidad de Ciudad del Este, también duerme en la Corte Suprema de Justicia.
Así, mientras el país se entretiene con los INCENDIOS y las críticas al gobierno de Mario Abdo Benítez, a su ministro del Interior y de Agricultura; y mientras a la clase política corrupta comandada por los CARTISTAS se les sigue el juego para desviar la atención, el CLAN ZACARÍAS que no pasa de ser una GAVILLA FAMILIAR DE LADRONES, goza de la impunidad y se pase por el mundo, disfrutando de todo lo robado.
