Fue en la mañana de este martes, al inicio de la sesión ordinaria, cuando profesores de escuelas de fútbol fueron a reclamar más apoyo de los concejales, ante el abandono en el que desarrollan sus actividades por la falta de ayuda de la institución municipal.
Pidieron que se compren pelotas, atuendos, y que se instituyan premios, al tiempo de reclamar a los concejales que algunos de ellos acuden solamente para sacarse fotos y después desaparecen, en evidente alusión de los ediles de “Yo Creo”.
Estos a su vez inmediatamente se tomaron por aludidos, y el más violento de todos, una vez más, fue Pedro Acuña, cuñado recaudador del intendente Miguel Prieto. Acuña interrumpió a los visitantes que exponían sus inquietudes, y hasta amenazó con dejar sin quórum la sesión, mostrando que es él quien maneja a la mayoría de serviles, y los demás están solo para cumplir órdenes.
Los profesores de escuelas de fútbol tuvieron que retirarse sin recibir respuesta alguna, y los lacayos de Prieto ya no permitieron el ingreso de ex funcionarios municipales que fueron a expresar su reclamo por la falta de cumplimiento de un compromiso firmado por el intendente para el pago de sus indemnizaciones, tal como ya lo dispuso la justicia en todas las instancias.
Esos ex funcionarios ya no pudieron ingresar, y fueron literalmente arrastrados hasta el portón de la Junta Municipal, en una actitud totalmente patoteril de los concejales prietistas, quienes así censuraron a la ciudadanía libre, y atacaron directamente la libertad de expresión de la goza todo contribuyente del municipio.
Cada vez más nerviosos ante inminentes nuevas imputaciones, y la alta posibilidad de que el intendente Prieto guarde prisión domiciliaria y tenga que dejar la Municipalidad, sus lacayos en la Junta Municipal recurren a la violencia y a la censura ante la falta de argumentos para responder a quienes reclaman irregularidades o denuncian las injusticias o la inacción.