El programa «Hambre Cero en las Escuelas» representa un cambio de paradigma en la gestión entre instituciones del Estado para garantizar, por un lado, la alimentación en niños y jóvenes y, por el otro, generar ingresos en distritos en situación de vulnerabilidad.
A través del programa se elaborarán pliegos de bases y condiciones de forma estándar, con uniformidad de precios, cantidad, calidad y, por sobre todas las cosas, puntualidad, indicó el ministro de Desarrollo Social, Tadeo Rojas, en entrevista con Paraguay TV.
El programa evitará que no haya despilfarro de dinero ni de alimentos. «Existe la Ley del Consejo Nacional de Donación de Alimentos que vamos a incorporar (a Hambre Cero), de manera que aquellos alimentos que no se consumen, por el motivo que sea, sean donados a un banco de alimentos para ser destinado a hogares de ancianos, de adultos mayores y de niños, a comedores comunitarios o alguna institución o entidad sin fines de lucro», explicó Rojas.
Es uno de los proyectos más ambiciosos en lo social del gobierno de Santiago Peña, dijo, no sólo por lo que representa a nivel de alimentación, combatir el ausentismo escolar y erradicar el hambre. Pero también tendrá un componente económico para generar ingresos a familias de la agricultura campesina.
Modelo de gestión
«Ya hace más de dos meses atrás, incluso antes de la sanción de la ley en el Congreso, conformamos un equipo técnico interinstitucional integrado por los ministerios de Educación, de Salud, a través del Instituto Nacional de Alimentos (INAN), del Ministerio de Economía, de Desarrollo Social, de Agricultura y Ganadería, del MITIC, de la Dirección de Contrataciones Públicas, Contraloría General y el Gabinete Civil con asesores de primer nivel y se ha venido trabajando en el diseño de este programa», indicó.
El programa «atiende políticas sociales y de atención a sectores más necesitados, que es lo que realmente es la obligación del Estado y lo que muchas veces se ha venido descuidando mucho tiempo atrás», puntualizó.
Primeras licitaciones
Para las primeras semanas de mayo se esperan las primeras licitaciones en 75 distritos a ser priorizados.
«A más tardar el 10 de mayo estaríamos haciendo los primeros llamados» y el objetivo es contar con el servicio de alimentación escolar en escuelas de estos distritos «a más tardar en los primeros días de agosto, después de las vacaciones de invierno».