El ministro de Agricultura y Ganadería (MAG), Carlos Giménez, detalló la situación de la cosecha de tomate a nivel país, que se vio gravemente afectada por las condiciones climática de los primeros meses del año. De 1.00.000 kilos que se esperaban, se tendrán cerca de 80.000 kilos.
«Es bajo el nivel de producción para esta época y para lo que nosotros teníamos planificado», informó en conferencia de prensa. Señaló que las condiciones climáticas, con las olas de calor de enero y febrero, y un otoño atípico golpearon muy fuerte a la agricultura familiar.
«El 85% al 90% (de los cultivos) fueron afectados y de los 1.00.000 a 800.000 kilos que teníamos (en anteriores cosechas) vamos a tener 80.000», puntualizó el ministro.
Pese a la asistencia técnica del MAG, el elevado calor y la falta de lluvia afectaron el rendimiento de las cosechas, que repercuten actualmente en la demanda de tomates en el mercado interno. Añadió que las condiciones climáticas afectaron a toda la región y en especial a la agricultura familiar.
Adopción de tecnología
Una alternativa para paliar los efectos del clima es la adopción extendida de tecnología. Sin embargo la inversión es muy alta, por lo que el ministro sugirió que se financien este tipo de proyectos a través del Crédito Agrícola de Habilitación (CAH), el Banco de Fomento, u organismos de asistencia.
No obstante los precios de venta de la producción bajo invernadero son menores a los costos promedio de venta de la producción a cielo abierto (Gs. 2.500 por kilo frente a Gs. 5.500 por kilo).
