Es lo que señala el comunicado del Sindicato del Ministerio Público de nuestro país, al sentar postura por el segundo aniversario del “reinado” de Emiliano Rolón Fernández al frente de la Fiscalía en Paraguay.
El sindicato de funcionarios del Ministerio Público (Simipar) criticó duramente la gestión de Emiliano Rolón como Fiscal General, sobre todo en lo que respecta a la contratación y nombramiento sin el perfil adecuado. También denuncian usan como castigo los traslados y reasignaciones.
“A dos años del nuevo capitán no solamente estamos a la deriva sino que ya está entrando agua al barco y muchos marineros desean que se hunda este deteriorado barco cansados de tanta inequidad e injusticias”. Con esta dura crítica inicia el comunicado emitido.
Agrega que la institución se ha convertido en una “bolsa de empleo para la ciudad de Escobar y sus alrededores sin importar si tienen la capacidad, idoneidad o la aptitud para el cargo” y saque solamente basta con haber nacido en una de esas ciudades aledañas. “Sin dejar de mencionar que este barco parece un geriátrico de tantas personas nombradas y contratadas de la tercera edad”.
Expresa además que se los nombramientos y contrataciones se realizan sin importar el perfil o la edad de los postulantes, lo que se traduce en un pésimo servicio a la ciudadanía y en un desperdicio de los cargos, “como así, en una carga para la institución ya que con el pasar del tiempo no sabremos dónde ubicarlos”.
“El estado republicano en este barco no existe y mucho menos el respeto a las normas. Acá reina la tiranía, el despotismo y el chonguismo”, asegura.
Dice además que la cercanía al Fiscal General de algunos adjuntos, fiscales y directores “les marea y creen que les otorga súper poderes y amenazan con: mandar a echar, trasladar al interior, sumariar o cualquier frase que denote su súper poder y algunos más insolentes refieren que ni los sindicatos podremos evitar”.
En ese sentido, advierte que los traslados y reasignaciones de los funcionarios no se realizan para el mejor funcionamiento de la institución sino como castigo y para que el mensaje sea claro y contundente se infringe el contrato colectivo de trabajo desplazando a más de 25, 35, 50 kilómetros a los funcionarios.
“Se crean sedes y unidades fiscales sin contar con funcionarios, equipos informáticos, muebles y todo lo necesario para que pueda operar una unidad y para salvar esta situación no falta quien decide saquear otras sedes para cumplir con la falta de planificación. La improvisación es la constante”, resalta.
Finalmente alerta que todos “están desmotivados, cansados y hartos lo que convierte un escenario propicio para un motín que puede darse en cualquier momento si las inequidades, injusticias y avasallamiento a las normas no cesan”, concluye el comunicado.