Las infecciones de la piel, en especial los forúnculos o “susu’as” son cuadros clínicos frecuentes en los consultorios de Infectología. Estas lesiones -muchas veces subestimadas- pueden derivar en complicaciones graves si no se tratan adecuadamente.
¿Qué es el forúnculo o llamado susu’a?
La Dra. Stela Samaniego, jefa del servicio de Infectología del Hospital Central, explicó que: “Entre las infecciones más vistas en consultorio de Infectología está el Forúnculo o en el idioma guaraní el susu’a, el cual es una infección del folículo piloso (estructura de la piel que produce y sostiene un cabello) y del tejido cutáneo adyacente (piel o el tejido debajo de la piel)”.
“La forunculosis es la aparición de lesiones repetidas en el tiempo y en varias localizaciones. El germen más frecuente es el Staphylococcus aureus, que es un agente comensal de la piel (microorganismo que vive en la superficie de la piel sin causar daño), y cuyo contagio es interhumano (humano a humano)” comentó.
¿Cómo se manifiesta?
“Este microorganismo puede estar normalmente en la piel sin causar daño, sin embargo, los lugares de frecuente colonización son las fosas nasales, los pliegues cutáneos, las axilas y la ingle, así como la cavidad oral, pudiendo desencadenar infecciones cuando se altera la integridad de la barrera cutánea o mucosa” detalló la especialista.
“Puede producir infecciones de los distintos estratos de la piel y sus componentes. Se manifiesta como una hinchazón localizada, con dolor, enrojecimiento y calor local”.
¿Cuáles son algunas complicaciones?
“Si la lesión progresa aparece una secreción purulenta (pus) que puede curarse sola o en ocasiones, complicarse con afectación profunda como celulitis”.
“Incluso puede pasar al torrente sanguíneo y diseminarse a otros órganos como pulmón, corazón (endocardio), cerebro (meningitis o abscesos cerebrales), columna (espondilodiscitis) y otros”, señaló.
¿Qué tratamiento debo seguir?
En relación al tratamiento, la especialista enfatizó que “No se recomienda su manipulación fuera del ambiente hospitalario. Requiere antibióticos específicos y una higiene adecuada”.
¿Cómo prevenir esta infección en la piel?
Asimismo, hizo hincapié en la prevención resaltando que la mejor forma de evitar estas infecciones es mediante un correcto lavado de manos luego del contacto con superficies, la descolonización nasal con mupirocina en caso de portación nasal.
Recomendaciones médicas
Si la infección ocurre repetidamente, la doctora recomienda el baño diario con clorhexidina al 4%. También el uso de toallas diferenciadas para rostro y cuerpo (para evitar la autoinoculación de lesiones), un correcto cepillado de los dientes y el buen manejo de la ropa de cama como el lavado frecuente de sábanas.
Control médico es fundamental
Finalmente, Samaniego subrayó la importancia del seguimiento médico “El control médico es fundamental para valorar la evolución del cuadro. Sobre todo en las infecciones que se producen a repetición.
“El antibiótico debe estar dirigido al trimetoprim-sulfametoxazol, o, en casos graves, vancomicina intravenosa”. detalló la especialista.