Es el rápido análisis que se puede realizar al tomar en cuenta la reunión a las apuradas que organizaron en la sede de la Junta Municipal, supuestamente “preocupados” por la crisis comercial de Ciudad del Este. Lo que quedó claro es que varios de los concejales de Ciudad del Este desconocen las acciones oficiales para enfrentar la crisis comercial.
La invitación para la reunión del viernes último fue realizada a través de grupos de Whatsapp, y si bien estuvieron referentes de sectores importantes de la vida diaria de Ciudad del Este, no quedó una postura final que se puede llevar ante los organismos de Gobierno, que de hecho ya están realizando algunas gestiones para asimilar el impacto de las medidas que va tomando Brasil.
Tan improvisada fue la reunión del viernes, que, por ejemplo, el concejal Juan Ángel Núñez (ANR) pidió que “se presenten concretamente todas las propuestas para sacar una conclusión en bien de la comunidad”, algo absolutamente lógico.
El Diputado Carlos Portillo dijo que “está a las órdenes de todos”, para apoyar todas las propuestas desde el Parlamento, y el concejal Herminio Corvalán sostuvo que “todos sin distinción” deben hacer fuerza conjunta ante esta gravísima problemática económica que atraviesa Ciudad del Este.
Ninguno de ellos propuso solución concreta alguna, hasta que el dirigente taxista Valerio Martínez reclamó que en esta reunión tenían que estar el gobernador Roberto González Vaesken y el Intendente Miguel Prieto, quienes no habían sido invitados por los concejales, y de hecho ya estaban realizando otras gestiones con otros gremios del comercio.
Con esta improvisación, y mientras Brasil impone cada vez más medidas para perjudicar al comercio esteño, la crisis comercial que causa zozobra en Ciudad del Este está muy lejos de ser revertida, muy a pesar de las bajas arancelarias y de impuestos que está emprendiendo el gobierno central, tras su encuentro con dirigentes empresariales que no fueron a la reunión con los concejales.
